La actividad comercial bajo el régimen de franquicia ha experimentado un crecimiento espectacular en los últimos años. Hoy en día es difícil recorrer cualquier calle de una ciudad o un centro comercial y no encontrarnos con un sinfín de marcas que operan bajo esta fórmula. En España se calcula que dicho sector representa un 15% del comercio minorista. Según los últimos datos de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), la facturación anual de este sistema roza ya los 24.787 millones de euros.
Un primer síntoma del parón económico es el número de establecimientos operativos. A finales de 2007 había 59.182 locales abiertos frente a los 58.901 que se registraban en julio de 2008, lo que significa una reducción de 281 puntos de venta. Esta pérdida en el número de establecimientos no ha afectado excesivamente a la creación de empleo dentro de este sistema comercial. Si a finales de 2007 la franquicia daba empleo a 234.415 personas, en julio de 2008 el número era de 240.875, es decir, 6.460 empleados más.
La pregunta que se formulan emprendedores e inversores es: ¿cuáles son las razones por las que apostar por el modelo de franquicia? En palabras de Óscar Gil, director jurídico y financiero de la enseña de papelerías Carlin, «esta fórmula permite a gente ambiciosa y emprendedora, pero con escasa preparación empresarial, la creación y dirección de una empresa, con un negocio propio gracias al conocimiento, experiencia, formación y supervisión del franquiciador, minimizando riesgos y acercando el éxito a personas inexpertas, pero con ganas de labrar su futuro».
Para Francisco Javier Pelayo, director general del Grupo The Chic Corporation, que gestiona varias marcas franquiciadoras, entre ellas la cadena de peluquerías Marco Aldany, «es un valor que asegura que nuestro dinero tenga rentabilidad y resultados certeros. En este caso (Aldany), se logra gracias a un concepto en el que no se deja nada a la improvisación. Estudiamos desde el perfil y las necesidades de los clientes hasta el potencial del mercado o las ubicaciones de los locales».
Jesús Capitán, presidente ejecutivo de la enseña de servicios domésticos y asistenciales SerhogarSystem, añade que «compartir recursos en estos momentos es esencial para la continuidad de las organizaciones».
Nuevas aperturas
En McDonald´s España, una de las cadenas de comida rápida más exitosas –en 2008 facturó 755 millones de euros, un 6,6% más que el año anterior–, su directora de relaciones externas, Teresa Rincón, anuncia que tras abrir 17 restaurantes más y generar cerca de 1.000 puestos de trabajo el ejercicio pasado –en la actualidad cuenta con 396 locales y una plantilla de 19.000 empleados–, para 2009 esperan repetir el mismo objetivo. «Nuestro modelo de negocio –añade– se desarrolla en un 80% en régimen de franquicia. Esto supone un importante factor de crecimiento para nuestros socios de cara a nuevas aperturas de establecimientos».
El acceso a la financiación es uno de los principales desafíos ante los que se enfrentan las franquicias. «Yo resumiría los grandes escollos en dos palabras: financiación y confianza», matiza Jesús Capitán. «Es obvio que si desde las instituciones y organizaciones, tanto políticas, gubernamentales y financieras, aportasen soluciones reales y no publicitarias o demagógicas, los resultados para los pequeños empresarios y emprendedores serían otros, y no creo que todos los que pensamos eso estemos equivocados», protesta.
Preguntado por más detalles sobre los problemas que encuentran a la hora de captar fondos, Capitán avisa de que «en algún caso hemos tenido que devolver una cantidad que se nos entrega como señal para reserva de zona, una vez que al futuro franquiciado le ha sido denegada la financiación por una entidad que días antes había concedido la misma financiación. Rechazada por motivos que el representante de dicha entidad no ha sabido o no ha podido explicar. Creo que nos están tomando el pelo de manera flagrante», concluye.
Pasos previos
La franquicia, en muchos casos, se presenta como una salida a la situación de desempleo. Pero, ¿qué aspectos han de analizarse a la hora de elegir una u otra firma? Óscar Gil, director jurídico y financiero de Carlin, cree que el interesado «debe averiguar cómo funciona el modelo de la franquicia seleccionada».
Por su parte, Francisco Javier Pelayo, director general de The Chic Corporation, sostiene que «sin importar la marca de franquicia por la que se quiera apostar, lo fundamental es montarla porque se cuenta con el espíritu emprendedor. En el caso de una persona que quiera apostar por abrir una tienda de Marco Aldany, el siguiente consejo es que siendo peluquero o no, busque un negocio rentable donde invertir. En la central contamos con una estructura departamental que garantiza la información y el asesoramiento integral para los franquiciados. Tenemos personas que han venido de otros sectores (textil), sin experiencia en el sector y hoy tienen diez salones abiertos por toda España».
Con el objetivo de proporcionar elementos de credibilidad y confianza entre los potenciales emprendedores y consumidores, a finales de 2007 la AEF puso en marcha el Certificado de Calidad de la Franquicia. En esencia, este sistema tiene como fin fundamental establecer los requisitos necesarios para garantizar que las empresas que lo adopten cumplen unos criterios de calidad en la comercialización. Estos requisitos son: marca, existencia de un saber hacer, formación y asistencia a los socios.
XAVIER VALLHONRAT PRESIDENTE DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE FRANQUICIADORES (aef)
–¿Por qué recomendaría invertir en el sistema de franquicia en una coyuntura como la actual?
–Una de las ventajas más importantes que tiene invertir en una franquicia es que se cuenta con la experiencia previa del franquiciador. Se minimizan los riesgos, ya que este último ha testado y comprobado el éxito de su negocio antes de ofrecerlo. Por otra parte, hay una formación inicial y continua, apoyo publicitario, control logístico, herramientas de marketing… que hacen que el franquiciado no se sienta solo en su caminar empresarial, sino que cuenta con el respaldo de una marca detrás, algo que no se tiene cuando se monta un negocio por cuenta propia.
–¿El crecimiento de la franquicia seguirá en un contexto de recesión?
–La revisión que hemos realizado deja claro que la franquicia española continúa creciendo, a pesar de la coyuntura de crisis que atravesamos. Es evidente que esta realidad no está afectando a todos los sectores por igual, ya que mientras en unas actividades se producen cierres de centrales en otras se van creando nuevas redes, lo que permite que el sistema en general no se esté resintiendo de manera acusada. Sí es cierto que los porcentajes de crecimiento no son tan relevantes como en años anteriores.
–¿Cuáles son los principales males que afectan a la franquicia?
–Sin duda, hoy el problema principal es la falta de financiación por parte de los bancos: es una época en la que hay locales, hay candidatos a franquiciados, pero no hay dinero. En mi opinión, el sistema de franquicias aún no ha tocado techo. Ya está maduro, pero continúa creciendo.
–¿Es un buen momento para salir al extranjero?
–Siempre es un buen momento para acometer un proceso de internacionalización. Lo que no se puede hacer en época de crisis es quedarse a esperar lo que va a pasar. Y eso lo tienen claro las cadenas españolas, que cada vez apuestan más por salir al exterior
Fuente: Finanzas.com