La violencia es parte del hombre. ¿Acaso Caín no mató a Abel? Rousseau creía que el hombre era bueno y que la sociedad lo degradaba. Para Hobbes el hombre se sometió al Estado para evitar que la guerra acabara con todos.
Destruir es más fácil que hacer
Los proyectos nunca se cumplen en un 100% y deben sortear la ley de Murphy según lo cual lo que puede salir mal va a salir mal.
Por otra parte somos animales de costumbres y nos resistimos a que, cuando recién comenzamos a disfrutar lo nuevo, ya debamos estar creando un entorno para que las nuevas ideas florezcan y destruir a las viejas que ya no sirven.
Para Darwin sobreviven quienes se adaptan al cambio. Schumpeter afirmó que el capitalismo es por naturaleza un método de sustitución de lo nuevo por lo viejo. Lo llamó destrucción creativa.
¿Cómo defenderse de la innovación? De las empresas ferroviarias de EEU, de principios del siglo XX, sólo subsiste el 1%. No hay creación de lo nuevo sin destrucción se lo viejo. La destrucción positiva se logra cuando el resultado del cambio es beneficioso para el conjunto de la sociedad, bajo la forma del progreso, aunque muchos no puedan sobrevivir.
Experimentación, capitalización, gestión, competencia y consolidación
Al principio se posee tecnología pero falta método: la radio no fue rentable hasta que se financió con publicidad, y la electricidad, recién dio ganancias cuando se dejó de cobrar una cuota fija a todos, y se cobró por el consumo real.
Para innovar hay que tener imaginación, como dijo Víctor Hugo "las que arrastran al mundo no son las máquinas sino las ideas".
Los hombres pasan, las instituciones quedan
Las empresas que realizan la destrucción positiva son las que se reconstruyen a sí mismas en forma continua, pasando de la continuidad a la discontinuidad, creando, acelerando el cambio, abriendo la toma de decisiones. El éxito engaña porque nos incita a hacer lo mismo que estamos haciendo, sin darnos cuenta que otros aspiran a conquistar lo que logramos, mejoran o abaratan los productos que nosotros hacemos y entonces si seguimos haciendo lo mismo puede ser el principio del final.
No hay que conformarse con ser líder hoy sino con serlo también mañana
Hay que evaluar la situación, descartar riesgos con recompensas poco atractivas o ilusorias, concentrarse en lo importante e integrar el análisis con la acción. Bill Gates a los 19 años vendió el sistema operativo D.O.S. a IBM para hacer funcionar los ordenadores personales sin tener un producto innovador; sino con el diseño mejorado de un sistema que compró. El éxito depende de combinar ideas creativas, curiosidad por aprender y habilidad para actuar
Cuando Dios creó al mundo dejó partes incompletas
En lugar de proveer el pan, la naturaleza da trigo, en vez de ladrillos la tierra brinda la arcilla, y nosotros tenemos que construir el pan y los ladrillos. ¿Por qué funciona así?. Porque los creadores son quienes imitan a Dios en la tierra, no observan pasivamente, creen con fe emprendedora que lo definitivo, es sólo momentáneo, reconfigurable y virtual por excelencia.
El hombre creador no viene del pasado sino del futuro y se dirige desde él hacia el presente, opera de adelante hacia atrás. El porvenir lo busca transformando lo que desea en tareas cotidianas, sabiendo como operar sobre ellas con un proyecto transformador. Cuando la innovación no existe y nos sometemos a los mandatos del pasado, renunciamos al presente, sin aceptar el desafío de enriquecer lo que pasa mediante la renovación.
La idea es mantener la flexibilidad hacia las oportunidades, saber cómo eliminar las viejas ideas que nos impiden cambiar, o que se convirtieron en paradigmas que nos rigen de manera silenciosa; es lo que llamamos destrucción positiva.
Para renacer, reinventar y revolucionar, hay que atreverse dejar lo que ya no es, para que crezca lo que puede ser. Siempre que se gana algo se pierde otra cosa; siempre que se cierra una puerta se abre otra. Algo anda mal en los ciclos humanos, cuando ganamos experiencia perdemos imaginación. Como propone Quino quizás sería mejor:
"Pienso que la forma en la que la vida fluye está mal. Debería ser al revés. Uno debería morir primero, para salir de eso. Luego, vivir en un asilo de ancianos hasta que te rajen cuando ya no sos tan viejo. Entonces empezás a trabajar. Trabajás por cuarenta años hasta que sos lo suficientemente joven para disfrutar de tu jubilación. Fiestas, fiestas negras, parrandeadas, drogas, alcohol, salís con mujeres o tipos, qué se yo; hasta que estás listo para entrar en la secundaria. Después pasás a la primaria, sos un niño que se la pasa jugando sin responsabilidades de ningún tipo. Luego pasás a ser un bebé, vas de nuevo al vientre materno, pasás los últimos nueve meses de tu vida flotando en líquido amniótico hasta que tu vida se apaga en un tremendo orgasmo.
ESTO SÍ QUE ES VIDA… "
Dr. Horacio Krell, Director de Ilvem y propulsor de la UP. Consultas a [email protected]