La financiación es, en estos momentos, una de las principales barreras a las que se tienen que enfrentar los emprendedores a la hora de montar un negocio puesto que las entidades de crédito se muestran bastante reticentes a dar dinero para nuevos proyectos. Sin embargo, el mercado ofrece otras muchas opciones al respecto
Modelos de financiación dentro del entorno de la empresa
La financiación propia, ya sea a través de los ahorros que se hayan acumulado o, por ejemplo, de la posibilidad que ofrecen las administraciones públicas de invertir el dinero acumulado en la prestación por desempleo para esta finalidad, es la principal alternativa para invertir en una nueva idea. Asimismo, los amigos y familiares también pueden dar soporte económico a la compañía.
Métodos tradicionales de financiación
Los préstamos bancarios, a pesar de todo, siguen siendo las más interesantes alternativas de financiación, si bien es cierto que hay que tener en cuenta el plazo de amortización, el tipo de interés y el período de carencia que exigen antes de solicitarlos. En estos momentos, los bancos no están ofreciendo demasiadas facilidades.
Por otro lado están los microcréditos, es decir, créditos de pequeñas sumas de dinero que sirven para cubrir gastos urgentes y que han de devolverse rápidamente. Hoy en día existe una gran variedad de compañías que los ofrecen, lo que ha conseguido que sus condiciones sean mejores que en el pasado. Basta con ver las de los préstamos personales credilikeme para comprobarlo.
Fórmulas alternativas de financiación
Los métodos alternativos de financiación están más de moda que nunca. En este sentido, la mayoría de ellos tienen su origen en Internet y suelen conocerse por nombres anglosajones. Es el caso, por ejemplo, del cada vez más extendido crowdfounding o ‘micro-mecenazgo’, el cual consiste en la financiación de un proyecto a partir de las aportaciones de un colectivo de personas a cambio de un artículo simbólico.
De esta idea se deriva el playfounding, el cual consiste en la invitación a los usuarios a visionar determinados contenidos publicitarios de empresas patrocinadoras que, a cambio, ofrecen algún obsequio. Lo mismo sucede con el crowdlending, una alternativa al crowdfunding en el que la financiación es ofrecida por otras empresas.
Por su parte, el crowdsourcing o externalización de los servicios, el business angel o socio que, además de inversión financiera, aporta conocimientos y contactos, y las Sociedades de Capital de Riesgo también son interesantes alternativas de financiación alejadas de los mercados tradicionales.
Javier Gázquez . Responsable en España de la compañía global experta en marketing de contenidos Textbroker.es. Enamorado del Networking y la comunicación social da rienda suelta a su personalidad extrovertida en su bitácora www.Blogtimista.es