Tal y como cuenta la sinopsis, “Tom tiene piezas de un iPhone alojadas en su cerebro y puede ver mucho más de lo que cualquier ser humano podría imaginar. Como si el teléfono le hubiera cedido sus capacidades cibernéticas, Tom está permanentemente conectado a la red y es capaz de interceptar e-mails y SMS, hackear cuentas de bancos, hacer búsquedas exhaustivas en Internet, grabar videos, tomar fotografías… ¡con tan solo pensarlo!”.
Vamos, lo típico, y sin tener que cargar la batería ni pagar tarifa de datos. La dudas que me surgen son: ¿podrá el protagonista bajarse nuevos poderes de la App store?¿podría incluso descargarse el propio libro?
Llevo dos horas dándome en la cabeza con el teléfono y todavía no he adquirido ningún superpoder, pero tiempo al tiempo. El título del libro me anima: ¡ahí voy!
fuente: No Puedo Creer