En la fotografía podemos comprobar cómo uno de estos individuos ha conseguido no sólo sobrevivir sino llegar a una edad adulta gracias al Soporte de móvil con pajita (y vaso). No parece totalmente integrado en la sociedad, pero eso lleva tiempo y tenemos esperanzas de que en unos seis años pueda ser considerado un ciudadano útil.
Las personas que no padezcan esa falta de coordinación también pueden hacerse con el soporte, claro, en señal de solidaridad y lucha. Sólo hay que recordar que cuando alguien les pida un trago es posible que también les esté robando el móvil de forma amable. Que, dentro de lo que cabe, está bien porque un ladrón educado siempre hace que el robo duela menos.
Fuente: No Puedo Creer