¿Quién no ha visto alguna vez en series o películas estadounidenses un pic-nic empresarial, en el que el jefe prepara una “barbacoa” para sus trabajadores? Esta idea ya instalada desde hace décadas en los Estados Unidos es una tendencia con cada vez más adeptos en la Argentina. En general, tiene lugar no en un parque como estilan los vecinos del norte sino en una estancia o quinta alquilada, con la opción de que cuente con pileta si la época del año lo permite.
Conocidas como actividades OUTDOOR, el objetivo de este tipo de eventos es motivar a los empleados, integrarlos y mejorar la comunicación, además de borrar por un rato las jerarquías que suelen marcar quiebres entre los trabajadores de una misma empresa.
En principio, nosotros recomendamos que el día destinado a la actividad recreativa sea un día laboral, para evitar que los invitados tengan compromisos familiares y no puedan asistir. Una buena opción es un viernes, antesala del fin de semana. Pero si se planea para cualquier otro día hábil, debe contemplarse que si el encuentro se extiende más de lo pensado los empleados deberían contar con la posibilidad de ingresar más tarde al día siguiente.
En cuanto al menú, el asado es una de las opciones más elegidas. Carne de res, pollo y vegetales a la parrilla –para los empleados vegetarianos-, sumado a ensaladas varias y alguna entrada –que puede constar de empanadas o sándwich de chorizo- podrían conformar la carta. ¿El postre? El helado nunca falla. Para ello, creamos un “espacio dulce” con una marca reconocida, para que cada participante se sirva a gusto. Lo que convendría evitar es el alcohol; las gaseosas y los jugos de fruta estarían dentro de las posibilidades.
Con respecto al entretenimiento, organizamos partidos de fútbol para los hombres y de vóley para las mujeres. O encuentros mixtos. Una alternativa divertida y que sirve para integrar a trabajadores de distintos sectores y jerarquías, es la carrera de embolsados. También solemos incorporar catas de yerba mate, clases de capoeira, talleres de artes plásticas, campeonatos de tejo, truco, e incluso la instalación de terminales de PlayStation, Nintendo o Wii para los más jóvenes o pistas de mini-golf. Pero siempre teniendo en cuenta que se deberá entregar, si son competitivos, un premio al ganador o ganadores.
La música no debe faltar. Hoy las bandas en vivo están en auge.
Los sorteos son otra buena alternativa. Y, en este punto, siempre es preferible que haya varios premios de mediano nivel a que se entreguen pocos pero costosos. Así, más empleados se irán contentos del evento. También sugerimos obsequios para que todos se lleven algo, como llaveros, imanes o pins con el nombre del evento y/o logo de la empresa.
Compartir al aire libre, fomentar la camaradería, promover la cooperación e incentivar a los empleados: ¡un evento para fortalecer los vínculos y aumentar la productividad!
Yanela Biancardi / Detalles que marcan estilo, ideas que suman distinción
Organizadora Profesional de Eventos
Yanela Biancardi es Técnica en Organización Profesional de Eventos y Espectáculos, egresada de la Fundación de Altos Estudios en Ciencias Comerciales. Productora y Coordinadora de Eventos Corporativos y Sociales. Actualmente dicta conferencias y seminarios sobre Organización y Planificación de Eventos a nivel internacional. Es Directora de la Productora que lleva su nombre y Co Fundadora de Estilo Vernissages.
