Datos escalofriantes de la economía de Estados Unidos

El PBI de los EE.UU. recobró algo de fuerza en el tercer trimestre del año (último dato disponible). El mercado espera la convalidación de estas cifras durante el cuarto trimestre, habrá que esperar hasta el 27 de enero para verlo, pero es probable. A eso se suma que la economía americana construyó 200.000 puestos de trabajo en la medición de diciembre (preliminar), registrándose un descenso en la tasa de desempleo la cual se ubicó en torno al 8,5%. Paralelamente, el consumo avanza a un mejor paso y el crédito al consumo que estuvo durante muchos años en terreno negativo parece alcanzar nuevos bríos. Sin lugar a dudas esto puede o no ser el vaso medio lleno y los mercados financieros operaron en función de esta mejora. La pregunta que cabe realizarse es si estos datos no son frágiles e insuficientes como para convalidar un final definitivo a esta larga crisis, o más aún si hay algunas otras cosas que no se están teniendo en cuenta, las cuales pueden ser la antesala de nuevas recaídas.

Olvidándonos por un momento del daño que le puede ocasionar a EE.UU. complicaciones aún mayores en Europa y centrándonos en los mencionados indicadores, descubriremos que el dato de PBI del tercer trimestre (último disponible) registró un crecimiento trimestral anualizado del 1,8%, superior al 1,6% que esperaba el consenso de mercado a priori, y también mejor que el 1,3% registrado en el segundo trimestre del año. Pero para ser justo, también es un número inferior al que se registraba sobre el final del 2010, que rondaba el 2,8% y muy inferior al 5% de finales del 2009 cuando ya había comenzado la recuperación económica, denominada en aquella época “brotes verdes”. Lo que resulta claro es que este número no es suficiente por si solo para asegurar un mejoramiento sistemático del mercado de trabajo, señalado por el Presidente Obama como el principal problema de la economía.

ANALISIS SOBRE EL SECTOR LABORAL
Yendo justamente a ese tema, ¿no será el festejo de los números de empleo desproporcionado? En diciembre la tasa de desempleo descendió al 8,5% y se crearon 200.000 puestos de trabajo. La economía americana necesita un promedio de 150.000 puestos de trabajo creados por mes para absorber a la cantidad de nuevos trabajadores que ingresan al mercado. Durante todo el 2011 creó 1.640.000 puestos netos (137 mil promedio por mes). En los años anteriores los números fueron bastante peores. Durante el 2010 creó 940.000, mientras que en el periodo 2008/2009 destruyó 7.818.000 puestos de trabajo netos. El balance de los últimos 4 años arroja una destrucción neta de 5.238.000 empleos. En cuanto a la dinámica del comportamiento trimestral y teniendo en cuenta los últimos 5 trimestres, se observa que el dato correspondiente al cuarto del año anterior es superado por todos los trimestres precedentes anteriores con la sola excepción del segundo trimestre del 2011. Por el lado de la tasa de desempleo, que es otra encuesta que realizan las autoridades, vemos que el descenso desde los máximos post Lehman alcanzan 1,6 puntos porcentuales. La tasa en octubre del 2009 se encontraba en el 10,1% y en la actualidad alcanza el 8,5%. Analizando la serie histórica, post segunda guerra mundial, se puede ver que los niveles de desempleo de esta crisis solo fueron superados por la larga y tediosa crisis de los 80. En aquella oportunidad se alcanzaron valores de 10.8% de desempleo durante finales del año 82. La diferencia con la actualidad es que la tasa registró una caída mucho más rápida, habiendo necesitado solamente 11 meses para descender al 8,5%. Actualmente se han necesitado 26 meses para descender a la misma cifra y habría que ver si efectivamente continúa bajando. Un dato escalofriante lo configura la cantidad de semanas que un americano se encuentra desempleado en promedio, mientras que en el peor momento de la década del 80 alcanzaba 21 semanas, en la actualidad alcanza casi 41 semanas, configurando los últimos datos los niveles records históricos post guerra. Claramente la tasa de desempleo es alta y para peor parece que perdurable.

PRECIOS INMOBILIARIOS Y TRAYECTORIA FISCAL
Por otra parte, y como si fuera poco, tenemos el tema de los precios inmobiliarios, que como se recordará fueron los causantes de esta crisis que parece no tener fin. La mala noticia es que los mismos se encuentran en el peor momento (medidos por indicadores de S&P para un conglomerado de 20 ciudades de los Estados Unidos), desde comienzos de la década pasada. El índice de 20 ciudades para el mes de octubre (último dato disponible) evidencia una reducción del 33% comparados a los valores previos a la crisis, constituyéndose así en el peor registro desde marzo del 2003 a la fecha. Hay que destacar que de las últimas 17 variaciones mensuales 16 son negativas, es decir que desde  junio del 2010 en adelante, los precios en 20 ciudades promedio solo registraron una suba mensual (abril 2011). En castellano básico los precios siguen cayendo. Habían mejorado un poco a partir de mitad del 2009, pero pocos meses después retomaron la senda negativa silenciosamente, en forma parecida a lo sucedido a partir de mayo del 2006 cuando nadie reparaba en ellos. En tanto, hay ciudades que en materia de precios se encuentran más comprometidas que otras, son el caso de Las Vegas que registra una caída del 61% respecto a los valores pre crisis, Phoneix (-57%), Miami (-51%), Tampa (-48%), Detroit (-45%) y San Francisco (-41%).

Como frutilla de la torta tenemos los comprometidos números fiscales y las ampliaciones de emisión de deuda que planea gestionar el presidente Obama para cumplir con sus obligaciones, en un año que para colmo de males tiene elecciones presidenciales y en el cual también  puede tambalear la AAA.

Autor: Sergio Javier Mantoni. Economista y director de SJM Consultora Económica

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