Prototipo experimental de Austin Yang que reinventa un aparato antiguo: una base para iPod con aspecto de giradiscos.
Para mantener el esencial movimiento giratorio y el uso, la base se situa en el centro mientras el disco gira y la aguja se posa sobre él de manera que, si posamos la aguja comienza a sonar, si la apartamos paramos la reproducción y si avanzamos o retrocedemos su posición saltará de canción como los medios de control convencionales.
fuente: No Puedo Creer