Gestión de equipos de trabajo híbridos

Como gestionar equipos de trabajo híbridos

Los sistemas de trabajo híbridos que implican un equilibrio entre el home office y la vuelta a las oficinas ya son la nueva normalidad

En los inicios de la pandemia durante el 2020, el teletrabajo se volvió en muchos casos la única manera de cumplir con las tareas laborales diarias en su totalidad. Al momento en que algunos sectores de la economía comenzaron a abrirse, las empresas comenzaron a buscar estrategias para conseguir un equilibrio entre la presencialidad y el trabajo remoto, respetando las medidas de seguridad para su staff.

Es de esa manera que lentamente se comenzó a forjar lo que hoy ya es la nueva normalidad, sistemas de trabajo híbridos que implican un equilibrio entre el home office y  la vuelta a las oficinas. Por si al trabajo remoto le faltaba pasar por algún test, el 2020 fue la prueba de que esa modalidad de trabajo no disminuye la productividad de la organización, sino que por el contrario, puede ser un plus que aporte a la estrategia empresarial.

Es por esto que se espera que la modalidad de formar equipos de trabajo híbridos se mantenga en el tiempo y sea el sistema de trabajo elegido por muchas empresas que luego de haberse visto obligadas a pasar por la experiencia, lo adopten de manera definitiva.

En este contexto, se entiende que la gestión de equipos deberá asimilarse a las nuevas formas y hay cambios que deberán realizarse. Es así, que la utilización de tecnologías de Recursos Humanos resultan claves en este proceso, contar con un sistema que garantice la claridad en la organización de la forma más efectiva posible. Así como también, encontrar espacios que sean útiles tanto para empleadores como para los empleados para acordar un flujo de trabajo que resulte claro y efectivo para todos. Estos aspectos no deberían ser olvidados ni subestimados en el caso de equipos de trabajo híbridos, que suelen proponer un gran desafío en términos de organización interna.

Algunos puntos que resultan claves para el éxito de esta modalidad es siempre mantener una comunicación clara y fluida entre las partes. Así como también mantener una cohesión en el equipo más allá de que en algunos casos no se comparta la presencialidad o se dividan en burbujas. Es importante alentar al buen clima laboral para conservar el estado de ánimo de cada integrante y también para fomentar las nuevas ideas y la proactividad del equipo. 

Por último, no olvidar que la cultura organizacional, el compromiso y la experiencia de los empleados son algunos de los valores más importantes dentro de una empresa, por lo que más allá de la modalidad de trabajo implementada, estos valores no deben dejar de construirse y alimentarse.

Lucas Mailland es el CEO y fundador de Fichap, startup de gestión de recursos humanos.
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