La presencia de la mujer en la franquicia, al igual que en otros sectores, es cada vez mayor. Casi el 30% de las empresas españolas son creadas por mujeres, un balance que supuso la creación de 194 empresas al día en el segundo semestre de 2006. Una tendencia que va al alza. Las franquicias se han convertido en una firme apuesta empresarial para las mujeres emprendedoras, ya que muchas de ellas buscan el perfil femenino para su expansión.
Un total de 35.564 empresas fueron creadas por mujeres en España durante el segundo semestre del ejercicio de 2006, lo que supone una media diaria de 194 empresas, según datos del Gobierno. Una tendencia que va al alza y que repercute en el sector de las franquicias, que se ha convertido en una firme apuesta empresarial para las mujeres.
Según datos de 2006 del informe GEM que analiza los 34 países de mayor influencia económica, un 30% del total de emprendedores españoles son mujeres. El mismo estudio señala que la mayoría de estas mujeres empresarias tiene entre 25 y 44 años, unas edades en las que se ven obligadas a acometer un gran esfuerzo para conciliar la vida familiar y laboral.
Estas dificultades hacen que la franquicia sea una de las opciones más viables para que las mujeres consigan ser económicamente independientes, ya que parte del trabajo está hecho. Ofrecen la ventaja de trabajar con presupuestos cerrados, de contar con una experiencia y un concepto de negocio de éxito probado y ofrecen formación y todo el apoyo necesario para el desarrollo del proyecto.
Los datos del Gobierno señalan que por comunidades autónomas, Andalucía es la que lidera la lista, alcanzando en el periodo citado 7.111 empresas abiertas por mujeres, seguida de Madrid, con 4.868 negocios y Cataluña, donde se sumaron 4.438 nuevas empresas con esta característica.
Así, la siguiente en formar la serie es la Comunidad Valenciana, con 3.461 nuevas empresas de mujeres, justo antes de Galicia en el ‘ranking’, que cuenta con un total de 2.468, seguido de Castilla y León con 2.016 negocios creados en el segundo semestre de 2006.
Castilla La Mancha, con 1.817 negocios y las Islas Canarias, que cuentan con 1.459 nuevas empresas impulsadas por mujeres ocupan el séptimo y octavo lugar, respectivamente en la lista, seguidos del País Vasco con 1.429 y Aragón con 1.334.
Por su parte, las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta cierran el listado de empresas creadas por mujeres en el país a lo largo del segundo semestre del ejercicio de 2006 con 61 y 54 empresas, respectivamente.
España es el cuarto país de la Unión Europea en creación de empresas por delante de Alemania, Francia y Reino Unido, según el último informe GEM, publicado por Deloitte. Uno de los datos más significativos es que el porcentaje de españolas empresarias es del 39%, la cifra más alta de la UE, según Deloitte.
Unos datos positivos en gran medida a los apoyos de las administraciones, aunque detrás de estas cifras la conclusión es que la iniciativa empresarial de las mujeres españolas surge como respuesta al desempleo, a situaciones de discriminación laboral, a dificultades para el reconocimiento de estudios, cuando son inmigrantes, o como alternativa al servicio doméstico.
El perfil de la mujer emprendedora
Sin embargo, aunque son muchas las féminas que crean sus propias empresas apenas son dos o tres los nombres de las que se convierten en grandes empresarias. Sirvan como ejemplo las hermanas Koplowitz o Rosalía Mera, ex mujer de Amancio Ortega. En el mundo de la franquicia los nombres principales son Manuela Rodríguez, fundadora de una cadena de que además de contar con 250 establecimientos en nuestro país ya está presente en 13 mercados internacionales. Amelia Arán, Eva Alfaro, Rosa Clará o Pili Carrera como fundadoras y máximas responsables de las cadenas de decoración y moda que llevan su nombre y que se han convertido en referencia en sus respectivas áreas de negocio. Carmen Fernández, presidente de la cadena de papelerías Fólder o Angela Simón, fundadora de las tiendas de regalos. Así, entre otras, dos mujeres que han sabido actualizar y transformar el negocio de la papelería y del regalo.
La emprendedora española tiene entre 35 y 40 años, uno o dos empleos anteriores, pareja e hijos, y unos ingresos de entre 1.500 y 1.800 euros. Su empresa –en el 55% ó 60% de los casos– no sobrevive a los tres años y medio. La falta de experiencia, de recursos y de conocimientos tecnológicos son las principales razones que explican el fracaso de muchas empresarias. Su mayor aversión al riesgo, la percepción de que existen menos oportunidades para crear empresas –porque, en general, la sociedad espera de ellas otro tipo de roles– y la autoevaluación de sus propias habilidades son las características que las diferencian de los emprendedores masculinos.
Las estadísticas demuestran que las mujeres están tan capacitadas como los hombres para emprender un negocio. Según datos del INE, el 51% del capital intelectual de nuestra sociedad lo componen ellas.
Las mejores oportunidades para la mujer dentro del sistema de franquicias las encuentran en los sectores de cosmética, moda y productos infantiles debido a que son los negocios que la mujer conoce mejor y en los que se siente más cómoda.
Las franquicias apuestan por la mujer
El papel discriminatorio que ha sufrido la mujer a lo largo de años ha comenzado a dar un giro en el mundo de las franquicias, hasta el punto de que muchas de ellas se decantan preferiblemente por la mujer como empresaria para desarrollar su proyecto de expansión.
Como ejemplo encontramos a la enseña de intermediación financiera Tus Mejores Hipotecas, que apuesta por el universo empresarial femenino como base para el desarrollo de su expansión en el mercado nacional. La enseña cuenta con un 25% de franquiciadas que se han decantado por esta opción de negocio para lanzarse al ámbito empresarial.
Tus Mejores Hipotecas apuesta por las empresarias como parte fundamental para la expansión de su cadena de negocio en el mercado nacional. Y lo hace, a través de una línea de apoyo formativo y de desarrollo para asesorarlas y apoyarlas en la creación de su propio proyecto empresarial. Esta iniciativa surge en consonancia con las políticas diseñadas por las instituciones en materia de subvenciones y formación para la mujer empresaria.
Otra apuesta por la empresaria femenina la encontramos en Acadomia, una firma de enseñanza a domicilio que en su segunda fase de expansión para este curso buscaba un perfil de mujer, madre, independiente y con iniciativa.
Acadomia, compañía de enseñanza personalizada a domicilio, acaba de cumplir 4 años. La compañía, que llegó a España en el primer trimestre de 2004, ha cubierto casi la totalidad del territorio español con 45 agencias operativas, más de 10.000 alumnos y contando, a su vez, con un 36% de multifranquiciados.
Otras empresas como LDC, especializada en Administración y Gestión de Fincas, fomentan el autoempleo femenino con la ampliación de su red de franquicias. Entre sus planes se encuentra la apertura de dos tiendas en Barcelona en las que al frente se posicionarán dos socias franquiciadas. Además recientemente ha inaugurado una tienda en Madrid cuya franquiciada también es una mujer.
The Body Shop es una muestra de la gestión femenina. No sólo supone un buen negocio para inversoras, sino que la propia enseña está presidida por una mujer, Carmen Almagro. Esta empresa de cosmética natural fue fundada por Anita Roddick, ya fallecida, y comenzó como una pequeña tienda que ella abrió como forma de mantener a su familia.
Por otra parte, existen programas como el impulsado por Tormo & Asociados “Mujeres en franquicias para dar a la mujer empresaria el protagonismo que merece en la franquicia aportando el conocimiento necesario para facilitar a la mujer la entrada en este sistema.
Las principales líneas de actuación de este plan consisten en acuerdos con Asociaciones Empresariales, Sectoriales y Administraciones Públicas, jornadas de presentación y mesas redondas gratuitas, una línea de información, acceso a una hora de consultoría gratuita o trámite y gestión de subvenciones.
Fuente: Tormo.es