Consejos prácticos para que el ahorro se convierta en un hábito
No sé a ti, pero personalmente se me da mejor gastar dinero que ahorrar. Sobre todo gasto en ocio (p.ej. restaurantes, espectáculos y bares).
Pero claro, cuando uno tiene una vida más adulta y planes a medio o largo plazo (p.ej. comprar un auto o una vivienda) tiene que empezar a ahorrar.
Para hacértelo más fácil puedes seguir los siguientes pasos con los mejores consejos para el ahorrador (fuente).
¿En qué gastas tu plata?
Antes de empezar a ahorrar necesitarás saber dónde fallas para poder cambiar tu dinámica de ahorro.
Esto resulta bien fácil, tan solo tienes que anotar en un bloc tus ingresos (p.ej. el salario) y los gastos que tengas al més. Después los divides por categorías como:
# Alquiler
# Comida
# Restauración
# Ocio
# Facturas del hogar (p.ej. electricidad)
# Transporte
# Etc.
Ahora deberías saber exactamente en qué se va tu dinero y verás dónde recortar gastos para aumentar tu capacidad ahorrativa.
Ten en cuenta que existen aplicaciones (p.ej. Fineiro) para smartphones que podrás conectar con tu cuenta bancaria y harán este mismo trabajo. Así te ahorras tener que llevar un registro manual de los gastos e ingresos.
¿Cuánto deberías ahorrar?
Obviamente no hay una cantidad mágica que deberías ahorrar, además cada caso tiene sus peculiaridades. Por ejemplo, no es lo mismo ahorrar para comprar un auto nuevo o para comprar una vivienda, ¿cierto?
Aún así, la regla del 50/30/20 es un buen indicador.
Esta nos dice que deberíamos dedicar el 50% de nuestros ingresos a gastos básicos como el pago del alquiler o hipoteca, la comida, el transporte o las facturas del hogar.
Por otro lado, podemos destinar alrededor del 30% de los ingresos a otros gastos más lúdicos como restaurantes, vacaciones o espectáculos.
Finalmente, dedicaremos el 20% restante de nuestros ingresos al ahorro. Así, si cobramos 10 mil pesos al mes, esta regla nos dice que deberíamos ahorrar unos 2 mil mensualmente.
¿Parece lógico no?
Pero claro, todo esto dependerá de tu situación personal. Puede que con el 50% de tus ingresos no cubras tus gastos básicos, y ahorrar el 20% de tu salario te resulte muy difícil.
3. Automatiza el ahorro
Una vez que tengas un análisis de lo que gastas al mes y en qué lo gastas (punto #1), podrás saber cuánto dinero te debería sobrar. En otras palabras, lo que podrás ahorrar al mes.
Si este dinero sobrante lo tienes en cash por casa o en tu cuenta corriente, es muy fácil gastarlo. Por eso lo mejor es ponerlo a buen recaudo antes de despilfarrarlo con caprichos innecesarios (p.ej. una nueva videoconsola).
Abrir una cuenta de ahorro (o depósito bancario) es una buena estrategia, estos no suelen tener comisiones y te pagan cierto interés por el dinero que deposites.
Para evitar gastar más de la cuenta, puedes hacer una transferencia automática a tu cuenta de ahorro (después de cobrar el salario) con el dinero que no vayas a necesitar.
¿Ves por dónde voy, no?
Así ahorrarás sin darte cuenta, que es la manera más fácil.
4. Evita compras compulsivas
Supongo que estamos de acuerdo en que gastar dinero es muy fácil, sobre todo con cosas que realmente no necesitas. Por ejemplo, salió un nuevo celular con una cámara con 5 megapíxeles más que (no) tenemos que tener.
Y el caso es que los expertos en marketing y publicidad hacen un trabajo excepcional a hacernos creer que necesitamos productos que en realidad no necesitamos.
Así que para combatir este consumismo extremo y no comprar caprichitos, hay un par de estrategias que podemos seguir:
- La regla de los 30 días: Simple, antes de hacer cualquier compra no planificada (p.ej. unos zapatos nuevos o un dron) para y date un respiro. Valora si se trata de algo que realmente necesitas (seguramente no lo será). Entonces apunta en un papel la fecha, lo que te dispones a comprar y el precio; y espera 30 días. Si después de ese tiempo sigues queriendo comprarlo, saca la billetera y cómpralo. Te darás cuenta que la mayoría de las veces terminarás por no terminar con la compra.
- La regla de 1 día: OK, si no estás dispuesto a esperar 30 días, tómate por lo menos 24 horas para decidir si esto es algo que realmente necesitas, compra precios y ofertas.
- Cuántas horas te cuesta una compra: Calcula cuánto cobras a la hora. Divide el precio de lo que quieras comprar (p. ej. un laptop) por tu salario a la hora. De esta forma sabrás cuántas horas tienes que trabajar para pagar esa compra.
- Recordatorios visuales: A mí me sirve mucho tener anotaciones y recordatorios visuales que me incentiven a ahorrar. Por ejemplo, puedes escribir ¡Ahorra! En tu tarjeta bancaria, tener como contraseña en Amazon NoGastesPlata, o tener un gráfico con el ahorro del mes de salvapantallas.
Estos pequeños trucos pueden ayudarte a evitar las compras impulsivas y te ayudan a recordar que tienes una única misión ‘ahorrar cuanto puedas’.
5. Planea tus compras y gastos
Planear las compras es otra manera de cortar con los gastos inecesários. Hay varias facetas donde un poco de planning nos ayudará a ahorrar un dinero extra. Considera los siguientes puntos:
- Haz una lista de la compra. Algunos estudios (fuente en inglés) afirman que si vas con una lista de la compra al supermercado ahorrarás un 25%. Como te puedes imaginar, al año esto supone un buen pico.
- Planea tus vacaciones con tiempo. Podemos gastar un montón de dinero en las vacaciones sin casi darnos cuenta. Por eso, planificar y crear un presupuesto para decidir dónde ir, el transporte que usaremos y dónde dormir puede ser una ayuda inmensa.
- En la mayoría de casos tenemos unos desembolsos grandes previstos (o casi previstos) todos los años. Por ejemplo, el seguro de tu carro o la compra de un nuevo refrigerador. Anticipar estos gastos y guardar dinero para estos terminará por ahorrarte mucha plata – p.ej. no tendrás que pedir un crédito.
6. Ahorra en tu día a día
Con unas pocas reglas puedes ahorrar cada día, al final del año te darás cuenta que habrás ahorrado un buen pellizco con este par de consejos:
- Ve a trabajar en bicicleta: Esto no es posible para todos, en algunas ciudades resulta más fácil que en otras. Pero si es posible, pedalear al trabajo es una forma saludable de ahorrar.
- Si ir en bicicleta no es factible (p.ej. tu trabajo está demasiado lejos) siempre puedes usar el transporte público – al final este siempre resulta más económico que el coche.
- Si tienes que comer en el trabajo lleva comida hecha de casa. Así no hará falta que gastes dinero en la cantina.
- Vivir en una ciudad grande brinda oportunidades de ocio gratuitas. Por ejemplo, entradas gratis para museos, conciertos por los que no hay que pagar o degustaciones de productos tradicionales.
Como puedes ver, hay muchas opciones para ahorrar poco a poco y podrás empezar mañana mismo.
7. Vende y cancela lo que no uses
A menudo se nos olvida que tenemos un montón de cosas por casa que no usamos. Por ejemplo, ropa que ya no nos gusta, celulares viejos, regalos de dudoso buen gusto de familiares y material que ya no usamos (p.ej. botas de fútbol).
Lo mejor es poner a la venta todas estas cosas (p.ej. en eBay o MercadoLibre) y sacar un rendimiento económico (aunque sea poco) de aquello que acumula polvo en nuestros cajones.
Otro clásico es tener suscripciones a servicios que no usamos – el más típico es seguramente el gimnasio. El punto #1 te ayudará a darte cuenta de si hay algo que estés pagando y no estés usando (p.ej. Netflix o gimnasio). Lo mejor que puedes hacer es cancelar ese servicio.
Espero que estos consejos te ayuden y puedas empezar a ahorrar y así cumplir tus objetivos.