Se debe comparar el fin buscado con la norma: ¿tenía como objetivo preservar la seguridad, cuidar el espacio verde, o asegurar el esparcimiento? Para resolver habrá que argumentar según los rituales del tribunal pero agregando otros factores, como los fines para los cuales el parque se creó.
Toda regla tiene el problema de cómo se aplica o se reglamenta, y todo fin el de seleccionar los medios adecuados para alcanzarlo. Cuando el que decide sobre la regla y el caso o el medio y el fin es inflexible, deduce la acción o calcula los medios. La realidad resiste a las recetas, pero sin división de poderes el poder absoluto ordena, y como decía Lord Acton: un poder absoluto corrompe absolutamente.
La excepción hace la regla
¿La excepción hace la regla, o la destruye? Para Popper la ley es sólo una hipótesis, rige hasta que se descalifica. Cuando el fin o la regla son puntos terminales, no se aceptan argumentos. Es sabido que la mejor forma de evitar que un error se convierta en hábito es el cotejo con la realidad, es en la acción donde aparecen las fallas y los
cambios. Si la norma se defiende a cualquier precio, se esconde el error barriendo la basura debajo de la alfombra.
Lo coherente es cuestionar las pautas rígidas y sustituirlas o mejorarlas como si fueran textos abiertos. El uso elemental regla-caso y medio-fin debe actuar sólo como guía porque someterse a la obsecuencia de la secuencia, impone que si sucede A, B será obligatorio. De esta forma, el pensamiento se ciega y no pude ejercer la libertad que es su principio rector. La
obediencia "debida" ataca así a la obediencia "de vida".
Líderes y jueces
Las reglas señalan acciones que se deben aplicar en ciertas situaciones. Para Von Clausewitz guerra es un acto de fuerza para obligar al enemigo a acatar la voluntad y la continuación de la política por otros medios. En el atentado contra las torres gemelas, la acción elegida por EEUU fue la guerra. No advirtió que cuando el enemigo es invisible, no existe el blanco preciso.
Si bien el aprendizaje es el producto de la acción y el error es la fuente de la sabiduría, no se deben ignorar las lecciones de la historia. Max Weber afirmó que violencia más violencia engendra mayor astucia y fuerza, algo así como "lo que no te mata te fortalece". El poder absoluto puede aplicar reglas y fines equivocados como puntos de llegada sin advertir que son los puntos de partida de la venganza. Es factible elegir los medios y aplicar las reglas pero no evitar los efectos de las decisiones. Saber adaptarse al caso y al juicio es la esencia de los buenos líderes y jueces, ambos necesitan aprender a argumentar.
La regla o el fin no constituyen un silogismo perfecto con el caso y el medio. La sentencia y la selección de la acción pueden ser la máscara de decisiones basadas en racionalizaciones o inventos. En la guerra de Irak, EEUU se basó en un supuesto equivocado, que Irak escondía armas atómicas.
Darle vida al razonamiento requiere considerar la realidad donde no hay determinismos sino tiempos, posibilidades y alternativas. Hay que descubrir lo que se oculta en las apariencia.
El hombre es él y sus circunstancias, decía Ortega y Gassett, y si no entendemos sus circunstancias no lo comprenderemos, él vive en procesos y no en secuencias, las situaciones influyen en su deseo.
Regla-caso y medio-fin pueden conducir al automatismo, a la interpretación o modificación y al cambio.
Siempre debe privar la argumentación, y por lo tanto la incertidumbre. No existe el resultado preciso y seguro porque nada fracasa tanto como sentirse dueño de la verdad.
La ley tiene su trampa, el fin la compite con otros fines. Ante los diversos mundos posibles somos afectados por los que legislan, sentencian o determinan los fines y que, como vimos, a menudo se equivocan y se mantienen en el error. Así crearon reglas, casos, fines y medios que colocaron al mundo en situación de peligro. Ante los desafíos que implica la forma de ejercicio del poder el individuo debe mantener una actitud estratégica y analizar como lo afectan. Las preguntas claves a formular son ¿dónde estaba?, ¿dónde estoy ahora?, ¿ dónde quiero estar?, ¿ cómo haré para conseguirlo?
Dr. Horacio Krell. CEO de Ilvem, Contador Público y Licenciado en Administración de empresas
(UBA). horaciokrell@ilvem.com