Pero, ¿qué pasaría si mañana llegase un inversor que te ofreciese comprar la empresa? ¿Qué harías? ¿Se la venderías por una sustanciosa cantidad y te irías al Caribe? ¿Le permitirías entrar pero sólo como inversor minoritario? ¿Te negarías en rotundo a la entrada de alguien que pretenda influir en las decisiones de la empresa? Y, sobre todo, si te planteases vender… ¿en qué momento lo harías?
Son muchos los emprendedores que, ante una buena oferta, no dudan en vender, bien sea para pegarse un merecido retiro en una isla tropical o para empezar de cero con un nuevo proyecto y unos ahorros más que dignos. La venta de una empresa, por muy jugosa que sea, a menudo trae consigo las dudas por parte del emprendedor acerca de si es el momento perfecto o no para hacerlo. Hoy os traemos varios ejemplos de empresas que tardaron muy, pero que muy poco en venderse:
– IntoNow. Seguramente uno de los ejemplos más representativos. Apenas tres meses de vida tenía IntoNow cuando fue adquirida por Yahoo por nada menos que 11,7 millones de euros. Parecía evidente que una aplicación que reconoce los programas de TV y pretende convertirse en el Foursquare de la tele era un proyecto más que apetecible.
– Blogger. No fue tan prematuro como IntoNow (cuyo ejemplo es prácticamente insólito y excepcional), pero tampoco tardó demasiado. En agosto de 2009, Pyra Labs lanzaba Blogger, una plataforma que cambiaría radicalmente, y en muchos sentidos, el mundo de la comunicación. Por aquellos años Google andaba a la caza y captura de proyectos, y en febrero de 2003 se hizo con la empresa, que contaba con algo menos de cuatro años de vida.
– YouTube. De nuevo Google al acecho. En 2005, tres ex empleados de PayPal crearon un portal de vídeos en el que los usuarios podían subir y compartir vídeos propios y ajenos. No tardó casi nada Google en darse cuenta de que aquello era una mina y en noviembre de 2006 sacó 1.650 millones de dólares del banco y compró la empresa. Y si la compra de YouTube no era suficiente, Google acaba de comprar Fflick, un site de recomendación de películas nacida el pasado verano, para reforzar el futuro YouTube Movies.
– Beluga. En julio de 2010 nacía Beluga, una empresa dedicada a la mensajería en grupo que permitía crear chats en los que los usuarios no sólo podían hablar, sino también compartir datos, crear redes entre ellos, etc. Como nuevo magnate de los negocios en internet, Facebook se interesó en este servicio y se hizo con él en marzo de 2011, apenas diez meses después de su nacimiento.
– Netspira. En agosto de 2000, dos españoles dejaban sus trabajos en Estados Unidos y se lanzaban a crear Netspira Networks, una compañía que consiguió crear una serie de plataformas insólitas a la hora de crear software para el pequeño transporte de paquetes de datos. Las grandes empresas no tardaron en intentar echarles el lazo, y al final el premio gordo se lo llevó Ericsson. Una de las ventajas es que, a pesar de la compra, los responsables de Netspira consiguieron que todo el equipo siguiese trabajando en la compañía.
Autor: Carlos Otto
Fuente: Cotizalia