Mi experiencia proviene del Desarrollo de Nuevos Negocios en una empresa líder de Consumo Masivo, a la cual renuncié cuando comprendí que era la hora de poner el 100% de mis energías en este proyecto. Mis socios estratégicos y cofundadores son: Trimia una empresa de diseño digital y estrategia en Redes Sociales y Jarawi, una plataforma de relacionamiento netamente argentina que también está en etapa de lanzamiento.
Yo tenía la idea de construir un medio de humor, que fuera fuente de trabajo para artistas del rubro y un canal para que los usuarios lo disfrutaran de manera gratuita. Primero pensé en una revista digital, que tuviese toques de multimedia. Tenía algunos ahorros y buscaba un socio que pudiera aportar capital de trabajo y este objetivo me llevó a Trimia. El proyecto comenzó a cobrar un formato orientado al 2.0 y cuando apareció Jarawi con su hipótesis de redes sociales como nuevo paradigma de comunicación, terminamos de generar esta innovadora plataforma que ya se puede disfrutar en www.decimosentido.com que sintetiza canal multimedia y herramientas de redes sociales.
El tema era elegir cómo hacer negocios. De muchas maneras, nos parecemos a un medio televisivo por lo que optamos por monetizar mediante publicidad. Hicimos un plan de negocios que permite austeridad publicitaria sin invasión ni contaminación visual. La publicidad va a llegar cuando tengamos una audiencia importante y para construir “la audiencia” van a pasar algunos meses. Por eso estamos buscando ángeles, capaces de ver la oportunidad de la misma manera que la vemos nosotros, para acelerar algunos procesos tecnológicos, publicitarios y artísticos. Pero igual estamos en marcha, los resultados, creo, también traerán inversores.
No hemos encontrado barreras de entrada rígidas más allá de las dificultades para encontrar inversores. Haciendo 
Lo que vemos como desarrollo sustentable y crecimiento orgánico, es la flexibilidad de la plataforma para incorporar modalidades de contenidos humorísticos (pensamos en sitcom de humor, en espectáculos en vivo, etc.), el desarrollo de la tienda que abarca desde venta de entradas a teatros y cines con obras relacionadas, hasta la producción de chistes personalizados mediante tecnología; y finalmente la posibilidad de hacer de Décimo Sentido una franquicia que nos permita acceder a países de habla hispana para hacer humor con las particularidades locales o regionales de cada uno, es decir humor chileno en Chile y colombiano en Colombia por usar dos ejemplos muy cercanos.
¿Te imaginás a tu humorista favorito en un contexto tuneado a medida de un producto comercial? ¿Y si esto vuela por las redes sociales diariamente y trae tráfico continuo a esta pieza de humor visibilizando esta marca? ¿Y si los espectadores pudieran ver a ese humorista en su computadora, en un teléfono o en su televisor hogareño junto con un menú que incluye a otros, reconocidos o emergentes? ¿Y si además las marcas patrocinantes tuviesen acceso a un reporte sobre cuánta gente lo vio, de qué edades, con qué otras preferencias marcarias, y en qué lugares del país o del mundo? ¿Y si los auspiciantes pudiesen identificar oportunidades de comunicar marca con focos precisos en determinado target? ¿Y si las marcas pudiesen luego comunicarse directamente con los consumidores a través de Décimo Sentido?
Humildemente les recomiendo a otros emprendedores que hagan foco, que la idea se empieza a llevar cada vez más tiempo y que no hay forma de emprender sin determinación, energía y riesgos. Como siempre, buscar socios que sepan, que se comprometan y que sufran o gocen de las consecuencias de sus decisiones.
Marcelo G. Urbano murbano@decimosentido.com