El barrio residencial de Putney, en un suburbio de Londres, es famoso por las regatas que sobre el río Támesis hacen los equipos de las universidades de Oxford y Cambridge. En una lluviosa mañana inglesa tengo el honor de ser recibido para un desayuno en su casa por el profesor Charles Handy, el autor de varios libros, entre los que destaca mi libro de cabecera The Age of Unreason, o La edad de la sinrazón.
Charles Handy es un hombre de unos sesenta años, muy agradable y cortés, y accedió a ser entrevistado (cosa que no hace frecuentemente) por mi absoluta terquedad y entusiasmo.
Su manera de ser es un tanto melancólica, y a la pregunta de cómo definió la idea de un mundo al revés, con cambios discontinuos, me contesta así:
"Yo nací y me eduqué en un mundo lleno de gráficas. Todo parecía que iba creciendo: más riqueza, petróleo, población en Europa, por decir algo. Sin embargo, desde hace unas décadas esas gráficas no se estaban comportando de la manera prevista y al tratar de buscar la razón me encontré que las lecciones del pasado no van a darme la respuesta que requiero para el futuro. Como ejemplo de esto le puedo dar los siguiente hechos: Los coches que circulan en Londres en 2000 lo hacen a la misma velocidad promedio que los de hace un siglo, por el tráfico y el exceso de vehículos.
Las familias nucleares se están convirtiendo más en "relaciones" un tanto elásticas y de corto plazo entre parejas. Un 40 % de los bebés que nacen en Inglaterra son de madres solteras.
Y finalmente, todos los libros de texto están ya obsoletos, sobre todo en lo que respecta a la administración. Por eso definí a nuestra era como aquella con cambios discontinuos, es decir que no tienen precedente".
El prof. Charles Handy es de origen irlandés protestante, pero ha vivido toda su vida en Inglaterra. Handy trabajó para una empresa petrolera y después lo llamaron para administrar una nueva y dinámica escuela de negocios, la London Business School. Él desarrolló los programas para ejecutivos de la Maestría de Administración de Empresas (MBA) y decidió también entrar como profesor, siendo graduado del M.I.T. norteamericano. Así empezó a crear teorías y a escribirlas y tiene varios libros publicados. Su libro de texto Understanding Organizations o "Entendiendo las Organizaciones" es, a pesar de su escepticismo sobre ese tipo de publicaciones, lectura obligada para estudiantes y ejecutivos del mundo entero.
Charles Handy es polifacético. Hace unos años una cadena de radio inglesa, la famosa B.B.C., le pidió que presentara su "pensamiento del día" con una idea filosófica o religiosa para los ingleses, rumbo a su trabajo. Y se volvió una celebridad, oído por millones de personas. Handy es un filósofo profundamente religioso que define a la muerte como el mayor cambio discontinuo que puede haber, y se define como un escritor primero y un filósofo del futuro.
Al hablarle sobre el ocaso de los países comunistas del Este Europeo, Handy me habla lo que el ex-canciller alemán Helmut Schmidt contestó cuando le preguntaron: ¿Cuánto tiempo se requeriría para que los alemanes orientales se volvieran emprendedores? Schmidt respondió: Una noche, nueve meses y 50 años. Esto define a la generación perdida por la insensatez nazi y la represión comunista.
De ahí saltamos al tema de la burocracia y al preguntarle qué pensaba de los burócratas, el prof. Handy respondió en forma genial:
"El término burócrata deberá desaparecer. La palabra significa el poder desde los escritorios y como en las organizaciones futuras ya no va a haber escritorios pues entonces esas personas deberán buscar otras fuentes de empleo, principalmente creando pequeñas empresas".
Como ejemplo de la debacle de la burocracia estatal en su país me cuenta acerca de que en la ciudad de Liverpool, cuna de los Beatles, el 40% de la población estaba empleada por las autoridades lo cual causó un enorme déficit fiscal y la bancarrota de la ciudad. La limpieza de la basura de Liverpool fue sub-contratada a una empresa privada francesa que lo hace, con utilidad por supuesto, por la mitad de lo que costaba hacerlo internamente, por lo que muchos barrenderos fueron despedidos. Y Handy predice que esa tendencia va a continuar, con las organizaciones de todo tipo volviéndose más pequeñas, con fuerza de trabajo muy flexible y multitud de pequeños sub-contratistas que la proveen de todo tipo de productos y servicios.
Le comento sobre mi pasión sobre la empresa familiar y me responde con tristeza que en Inglaterra no se está poniendo en el nivel que le corresponde al núcleo familiar y eso es terrible para la salud mental del país. Handy considera que las buenas familias piensan mas allá de la tumba y en el largo plazo. Y deben tomar muy en cuenta el orgullo familiar y la calidad de su vida.
Su opinión sobre las empresas es muy perceptiva:
"Los emprendedores ingleses no piensan en que su empresa sobreviva para siempre sino en hacerla crecer y venderla al mejor postor en 5 años y crear otra. Y por eso hay tantos problemas en Inglaterra".
"Las compañías en la actualidad son consideradas como un pedazo de propiedad por sus dueños y nada más. Y eso no es correcto ya que una empresa es como una comunidad, como una familia y la gente debe sentirse como que pertenece a esa comunidad, ya que esa permanencia le da sentido a su vida. Pensar en términos puramente mercantilistas y fríos es malo para todos incluido el sano desarrollo de la empresa."
"Por eso la formación de muchas empresas familiares pequeñas y medianas es una solución adecuada para todo el mundo ya que si crecen logran combinar a familias sanas con negocios florecientes. El ejemplo de un país donde el desarrollo económico se ha dado por millones de empresas familiares es Italia, donde a pesar de ser individualistas como somos todos los latinos, han formado redes de pequeños negocios para protegerse y al mismo tiempo ayudar a crecer sanamente".
¿Cuál es el secreto de la administración?
Charles Handy considera que un administrador exitoso es aquel que maneja el "conflicto constructivo" y mantiene siempre el balance adecuado entre las fuerzas que están dentro y fuera de la organización.
Terminamos la entrevista preguntándole su opinión sobre la situación en México y nos contesta que nuestro país tiene una gran oportunidad para ser el ejemplo de desarrollo sano para el mundo entero, por tener una cultura milenaria y mucha gente joven. No va a ser fácil y sugiere que no escuchemos a personas o países que nos dan consejos o respuestas basadas en el pasado (notablemente Estados Unidos o la URSS) sino mas bien, que nos basemos en nuestros propios instintos para sacar de ahí la sabiduría necesaria.
Charles Handy escribe sobre temas filosóficos gran parte de su tiempo, luego promueve sus libros por el mundo y dedica un período corto a "trabajar" en el sentido usual de la palabra, en consultorías o dando clases en la London Business School. Es, como se pueden dar cuenta, un individuo fuera de serie y les aseguro que de la lectura de sus libros vamos todos a comprender este mundo tan turbulento
fuente: Salo Grabinsky