Michael Schumacher, siete veces campeón mundial de la Fórmula 1 y piloto de Ferrari, acaba de anunciar su retiro de las pistas al fin de la presente temporada tras las carreras en Shanghai, Suzuka y São Paulo.
Con ingresos que superan los 60 millones anuales, Schumi es el segundo deportista mejor pago del planeta. Los números de su cuenta corriente suben más rápido que las revoluciones de su Ferrari. Diez minutos de su trabajo equivalen a 900 euros. Sólo el golfista Tiger Woods, con 75,8 millones de dólares al año, supera al piloto de Ferrari en el ranking de deportistas con más ingresos, gracias a su astronómico contrato publicitario con Nike. Aun así, las ganancias anuales de Schumacher ascienden a la nada despreciable cifra de 60 millones de dólares, de los que 35 son fruto de su contrato con Ferrari y el resto corresponde a acuerdos publicitarios, ya sean propios o los de su equipo (Marlboro, Martini, Puma, Vodafone…).
Su multimillonario vínculo con la escudería italiana lo ha convertido en el piloto de Fórmula 1 mejor pago de todo el paddock. Muy lejos del “Káiser” se encuentra su hermano Ralf (20,8 millones), con quien hasta el año pasado compartía representante. El tercero del ranking es el finlandés Kimi Raikkonen (18,3), mientras que el español Fernando Alonso ocupa, por el momento, la séptima posición con un contrato con Renault de 7,5 millones de dólares por temporada.
La revista Forbes, conocida por sus famosas listas sobre los personajes más ricos e influyentes del planeta, acaba de incluir al piloto alemán entre las treinta celebridades con más popularidad de la Tierra. De hecho, el heptacampeón del mundo es la cara más conocida del circo de la Fórmula 1, un negocio que se extiende por Europa, Asia y América y cuyo impacto económico trasciende en 200 países, con un total de 300 millones de espectadores. Sólo basta introducir Michael Schumacher en Google para que aparezcan más de 13.300.000 entradas con el nombre del deportista alemán.
Todo mezclado
En los últimos años, los pilotos se están convirtiendo en auténticas pancartas publicitarias. Los patrocinadores compiten por ocupar un lugar preferencial en los monos de sus deportistas.
El negocio llega a tal extremo que más de uno ha visto un meditado negocio en la famosa y polémica parada de Schumacher en la curva de la Rascasse del GP de Mónaco. El incidente le costó salir el último de la parrilla, pero las repetidas imágenes de televisión acabaron teniendo un efecto positivo para Ferrari, puesto que justo en aquel punto del circuito se hallaba la principal concentración de anunciantes de la escudería italiana. Marlboro aparecía en 11 carteles, Vodafone tenía 16 logos y, justo al lado, ocho símbolos de Shell, además de paneles publicitarios de Martini y Bridgestone. En total, aparecieron 42 logos de los anunciantes de Ferrari, por sólo cinco de marcas ajenas a la Scuderia.
Rico y solidario
Michael Schumacher sorprendió al mundo cuando, después del catastrófico tsunami que sacudió el sureste asiático a principios del 2005, donó un total de 10 millones de dólares (7,5 de euros), a favor de las víctimas del desastre.
El alemán se sintió directamente afectado por la catástrofe puesto que uno de sus guardaespaldas personales murió en aquella tragedia. El aporte, sin precedentes, se convirtió en la donación privada más grande de la historia y, a su vez, ayudó a que el piloto se rodeara de un áura de solidaridad que no le viene nada mal a su imagen.
Acusado de evasión
Sin embargo, las acciones del piloto de Ferrari son estudiadas con lupa y las voces críticas no tardaron en saltar a la opinión pública. El presidente del Partido Socialdemócrata Alemán, Franz Muntefering, reprochó el gesto de Michael alegando que “no me gusta que alguien dé diez millones y después no pague los impuestos”.
En varias ocasiones, el alemán ha sido acusado por los políticos de su país de evasión de impuestos, ya que no está bien visto que una de las principales fortunas de Alemania tenga su residencia fuera de las fronteras germanas, en Suiza. Schumacher compró hace algún tiempo una impresionante mansión en el país helvético, valorada en más de tres millones de euros. El piloto quiso satisfacer la pasión por los caballos de su mujer Corinna, de modo que mandó hacer un picadero en la propia finca.
Marcando tendencia
A los 37 años, la leyenda de Michael Schumacher ha marcado un antes y un después en la Fórmula 1. Sus sucesores han aprendido la lección y siguen los pasos del “Káiser” al pie de la letra. El actual campeón del mundo, Fernando Alonso, acabará a final de temporada su relación con la escudería Renault. Actualmente, el asturiano es el deportista mejor pagado de España, pero su nuevo contrato con McLaren le supondrá entrar en la lista de los diez deportistas con mayores ingresos del mundo.
La cuenta corriente del campeón asturiano se nutre de mucho más que su contrato deportivo, puesto que marcas como Sandoz, LeasePlan o Mild Seven apuestan por la figura del piloto español. La próxima temporada, Fernando romperá su vínculo con Guru y se convertirá en la imagen de la prestigiosa marca de moda Hugo Boss, patrocinadora de McLaren-Mercedes.
La hipotética retirada de Michael Schumacher a final de temporada tendría un gran impacto en todo el mundo de la Fórmula 1. Sin embargo, los candidatos a ocupar su trono como ícono publicitario ya han empezado a ganarse su lugar, por méritos propios.
Fuente: RI Sports