Los éxitos de Apple son muchos. Pero también existen retos. Y el más importante de ellos en este momento es la crisis del iPhone 4, un problema que la compañía de la manzana no ha sabido llevar muy bien.
Steve Jobs defendió a su compañía de los distintos ataques recibidos por haber lanzado un producto supuestamente defectuoso.
Para Apple, 2010 ha sido un año excelente en cuanto a ventas. Desde que el iPad empezó a distribuirse a principios de abril, ha vendido más de 3 millones de unidades. El éxito de ventas fue aún mayor con el iPhone 4, que se lanzó el 24 de junio en algunos países y ya ha logrado vender más de 3 millones de unidades.
Mal funcionamiento
Pocos días antes del lanzamiento del iPhone 4, empezaron a extenderse por Internet rumores sobre casos de mal funcionamiento. Se decía que había un problema con la recepción del teléfono. Dependiendo de cómo lo sujetara el usuario, la cobertura del iPhone 4 descendía. Estos rumores resultaron ser verdaderos. Concretamente, al tocar con la mano la zona del terminal que aloja la antena, el teléfono iba perdiendo señal hasta quedarse sin línea. Los internautas llamaron a este fenómeno el “agarre de la muerte”.
Apple se hizo mucho de rogar antes de dar una respuesta, y no fue muy acertada. El único consejo de Steve Jobs fue que dejasen de sostener el móvil de esa forma o que comprasen una funda que evitase el problema, que ahora regalará.
Luego, a principios de julio dio una respuesta más diplomática a las quejas de lo usuarios. Afirmó que el problema estaba en el software del artefacto. Un error en la fórmula hacía que mostrase más barras de cobertura que las que de verdad había. Se pidieron disculpas y se dijo que ya estaban trabajando en una solución. El pasado jueves fue lanzada una actualización del sistema operativo, que corregía el error dado por el indicador de cobertura, pero los problemas de señal persistían.
Para entonces, la campaña viral contra Apple ya estaba en movimiento. Consumer Reports, la organización más fiable en análisis de productos de consumo en Estados Unidos, había afirmado que no podía recomendar el iPhone 4 debido a los recientes problemas. A su vez, Bloomberg News afirmaba el pasado jueves, que los altos cargos de Apple ya eran conscientes del problema durante el proceso de elaboración del iPhone 4, pero decidieron seguir adelante porque no deseaban cambiar el diseño.
Explicaciones
Steve Jobs dijo ayer que esa información era falsa y que ya habían retado al medio para que demostrase esas informaciones. A su vez, atacó directamente el problema de cobertura, al que llamó Antenna gate, en referencia a cómo se sostiene el móvil: “Hemos visto que no sólo pasa con el iPhone 4”.
Según Jobs, el problema no es algo exclusivo del iPhone, sino que también podía experimentarse en otros móviles como el Blackberry Bold 9700, el HTC Droid Eris y el Samsumg Omnia II. En una demostración pública mostró cómo estos smartphones perdían cobertura al tocarlos en determinados sitios.
A su vez, Jobs dijo que el problema sobre el iPhone ha sido sobre todo mediático. Para ello se valió de varios datos. Por ejemplo, sólo el 0,5% de las llamadas al servicio de atención al cliente de Apple ha sido respecto a problemas de cobertura del iPhone 4. Asimismo, el porcentaje de devoluciones que ha tenido este producto ha sido de sólo del 1,7%, tasa muy inferior al 6% sufrido con el iPhone 3 durante sus primeros momentos: “No somos perfectos. Nosotros lo sabemos y también vosotros lo sabéis.”, afirmó ayer Jobs, “Todos los smartphones cuentan con puntos débiles. No sólo los tiene el iPhone 4”.
Con esto, Apple pretende así atajar todos los problemas de imagen que la compañía ha sufrido recientemente y acallar a sus críticos. Ahora falta ver si lo consigue.
Promesas de Apple
– “Se darán fundas gratis para el iPhone 4 y se le devolverá el dinero a aquellos que ya habían comprado una. El que lo desee, podrá devolver el móvil y obtendrán su reembolso”.
– “Se empezará a comercializar el iPhone en 17 nuevos países a partir del 30 de julio. Entre ellos, España. En esa misma fecha saldrá el iPhone 4 blanco”.
– “Ya hay una actualización del software para el iPhone 4”.
Apple y China
Hay lugares donde la presencia de Apple es meramente anecdótica. Y para cambiar esta situación, se hace necesario solucionar los problemas de funcionamiento del iPhone. China, con 1.300 millones de habitantes, resulta un mercado tentador para las empresas occidentales. Hasta hace poco, había sido un país bastante ignorado. Hay razones de peso detrás de esto. Este país cuenta con sus propias reglas, bastante difíciles de seguir. Entre ellas, la diferencia cultural y el intervencionismo del Gobierno chino.
La semana pasada, Apple inauguró en Shanghai su segunda tienda en el país dos años después de la apertura de la primera, en 2008. La inauguración de este local, junto con otros 25 más, que se espera que estén operables en el plazo de dos años, son muestra de que Apple por fin ha decido entrar de lleno en el mercado chino. Hasta la fecha, los canales de distribución para los productos Apple eran muy limitados. El iPhone, el único artículo que ofrece por el momento, sólo estaba disponible a través de China Unicom y se topaba con el gran obstáculo de que la empresa tiene aún que superar: buena parte de la clase media china llega apenas a los mil dólares al mes. El iPhone les costaba la misma cifra debido a que no contaba ni con los subsidios de las operadoras y ni con Wi-Fi.
Además, Apple tendrá también que vérselas con la adquisición ilegal de iPhones; la reventa de sus artículos, adquiridos por turistas chinos en otros países (algo legal, pero que no reporta beneficios a la empresa), y la feroz competencia por parte de empresas locales, que inundan el mercado con productos de inferior calidad a menor precio.
Algunos de estos problemas son, al mismo tiempo, prueba del negocio que Apple estaba perdiendo en China. El considerable número de compras de iPods, iPhones y iPads en el mercado negro hacen ver claramente que ciertos sectores de la población china están interesados en estos productos, y la afluencia de cientos de personas a la apertura de la segunda tienda no hace más que confirmarlo.
En este contexto, se antoja casi vital que la marca de la manzana solucione, o al menos aclare, los problemas de su nuevo móvil. Porque el mercado chino aún está por explotar, y porque el iPhone, allí, es su buque insignia.
Fuente: Ernesto Oyarbide (Expansión)