André Leonardo es un joven emprendedor portugués que tuvo una idea brillante: recorrer el mundo y entrevistar emprendedores de cada país para motivar a los jóvenes portugueses. Visitó 23 países y entrevistó a 143 empresarios.
El clima social, político y económico en Portugal no era el mejor. Desempleo, crisis y recesion eran palabras comunes en los medios y en la mesa familiar. Leonardo estaba a punto de recibirse y veía como compañeros ya recibidos no encontraban empleo y entonces tomo una decisión que cambiaría su vida y ahora la de muchos de sus jóvenes compatriotas.
El plan consistía en recorrer el mundo buscando historias inspiradoras de emprendedores y compartirlas a su regreso con el ecosistema emprendedor portugués.
El viaje duró un año y comenzó en noviembre del 2013. Durante ese período recorrió 23 países, se entrevistó con 143 personas y aprovechó para difundir las islas Azores y Portugal. Leonardo plasmó la experiencia en un libro con el objetivo claro de inspirar a los emprendedores lusitanos a crears empresas en su país. El libro tiene el claro nombre de ‘Faz acontecer’ (‘Haz que suceda’, en español).
El viaje
André Leonardo tuvo que recurrir al ingenio para cubrir los costos de viajar durante un año sin trabajar. Para financiarse vendió objetos personales, consiguió patrocinios en empresas y fundaciones y creó una campaña de donativos.
Para enfrentar posibles complicaciones de salud, un amigo estudiante de Medicina le enseñó consejos básicos de salud. Otro amigo, fotógrafo profesional en ese caso, le ayudó a escoger el material de fotografía y vídeo que necesitaba.
Al viaje se le sumaron dos misiones: Startup Lisboa lo nombró embajador para difundira el ecosistema tecnológico portugués por todo el mundo. El otro proyecto fueron unas jornadas de voluntariado en India, en una organización portuguesa sin ánimo de lucro.
A su regresó a Portugal en una entrevista al sitio Teknautas, habló sobre los cambios que experimentó tras su viaje: “Lo que yo creo hoy al cien por cien es que todos tenemos en nosotros mismos las capacidades para cambiar nuestra vida y destacar. Nosotros, con mucha voluntad, con mucho sacrificio, podemos cambiar, podemos hacer, podemos crear”, afirmó.
“Yo no dependo de nadie para construir mi vida. Naturalmente, para realizar proyectos necesitamos personas que nos apoyen, sí, pero cambiar depende solo de mí, no depende de nadie más. Si yo quiero, si yo trabajo, es posible lo que quiera que soy hoy. Esa fue quizá la mayor lección que saqué”, agregó.
Poniendo en práctica lo aprendido
Su visita a incubadoras y empresas le hizo aprender mucho, comoció gente que decía arriesgar y emprender y a la que los errores no impidió seguir adelante con valentía. Para aplicar lo experimentado Leonardo, en conjunto con el Gobierno de Azores y el Ayuntamiento de su ciudad natal, Angra do Heroísmo, está intentando crear un consorcio de ‘startups’ para el archipiélago, donde el ecosistema “aún es muy joven”.
De las 143 personas que conoció, sólo 16 aparecen en el libro “Si tuviera que escoger alguna [entrevista], una de las primeras que hice y que más me marcó fue la historia de Ricardo Teixeira”. Cuando era un adolescente (ahora tiene 39 años), Teixeira, portugués como Leonardo, quedó tetrapléjico. Eso no le impidió seguir esforzándose y llegar a trabajar con Microsoft. Tras salir de la multinacional, hoy tiene seis empresas dedicadas al mundo digital, una de ellas con base en Reino Unido.
“Cuando hablaba con él, estaba muy contento y entusiasmado con su historia”, dice Leonardo. Le preguntó cómo había conseguido todo esos logros en su situación. Él le respondió: “Mira esta silla de ruedas. Luego mírame a mí. Esto no es excusa para nada. Tengo todos vuestros problemas del día a día más mis problemas físicos. Mis padres no me dieron nada, ellos no son ricos. Tuve que ir para allá con todas mis fuerzas y tomar la oportunidad, luchar y hacer. Y lo conseguí”. Teixeira le decía: “Tu generación espera soluciones rápidas. Si no luchan, las cosas no suceden”. “Lo veo como un emprendedor en los negocios pero también un emprendedor en la vida”.
Durante el viaje visitó a emprendedores pero también a encargados de asociaciones de startups y escuelas de emprendimiento. En San Pablo conoció a Isabel Pesce Brito de Matos, una brasileña que había conseguido estudiar en el MIT gracias a becas y dinero ahorrado. Cuando regresó a su país creó Faz Inova, donde se imparten cursos de innovación, modelo de negocio o búsqueda de financiación, de manera presencial u online. “Ser productiva, saber negociar, saber aprender a aprender. Me di cuenta de que ninguna de estas cosas se aprende en la escuela. Las cosas que más me crearon oportunidades en la vida no se enseñan”, le dijo a Leonardo.
Cuando se le pregunta a Leonardo si volvería a hacer el mismo viaje, es rotundo: “Claro que sí. Si yo volviera atrás en mi vida, claro que sí, obviamente que sí. Fue espectacular no solo lo que aprendí, sino todo lo que conseguí traer a las personas, porque conseguí traer historias muy inspiradoras”.
Emprender en Portugal
Desde hace unos años, Portugal apuesta por el emprendimiento y el ecosistema de startups como una forma de salir adelante después de la grave crisis económica que llevó a un rescate europeo y que todavía se deja sentir en el país. De hecho, recientemente se lanzó Startup Portugal como una forma de atraer talento y canalizar la inversión.
André Leonardo es consciente de ello: “El Gobierno portugués está haciendo una apuesta muy grande en el emprendimiento”. Ahora es posible encontrar grupos de personas, portugueses o extranjeros, “que vienen para acá, que quieren crear empresa, que quieren hacer. Eso es muy bueno para un país que necesita rápidamente crecer y crear impacto económico”.
Él mismo tiene una empresa para incentivar a los portugueses a lanzar sus proyectos y ayudar a los extranjeros a establecerse. También tiene proyectos para incentivar la industria turística en las Azores: “Quiero ayudar, quiero crear empleo, quiero invertir”. Motivar a la gente a emprender y a realizar sus ideas fue lo que llevó a André Leonardo a viajar por medio mundo en busca de negocios y emprendedores increíbles. Ahora solo hay que materializarlo en casa.