Ganar dinero está muy bien. La idea no es trabajar únicamente para pagar impuestos, comer o vestirse sino también vivir bien. Para ello, una cuota de ambición y deseos de superación son necesarios. El tema son los extremos.
Es tan nocivo ser indiferente a la plata como extremadamente apegado a ella.
Una vez escuché una definición perfecta: El dinero es como los zapatos: un número menos aprieta, uno más incomoda. Esto, a mi modo imperfecto de ver, quiere decir que es deseable ganar mucho; pero es ideal volcar parte de los ingresos entre los sectores más necesitados.
Una parte para las obligaciones, otra para reinvertir otra para el placer y otra para ser socialmente responsable es una buena y sabia distribución del ingreso.
Feliz semana, felices emprendimientos, feliz vida para todos.
Marcelo Berenstein
mberenstein@emprendedoresnews.com