En la noche del aniversario número 50 del feliz matrimonio, el esposo llega a casa pero arrastrándose, no podía ni abrir los ojos, menos tenerse en pie,de puro milagro dio con su casa.
Cuando lo ve su esposa, muy indignada le dice:
– ¡Pero si estás hasta las patas de borracho !. ¡No lo puedo creer! Ahora dime, ¿Por qué en nuestra noche de aniversario?
– Yo ¡hip! . . sólo obedecí tus órdenes mi amor. . . ¡hip!
– ¿Cuáles órdenes inútil .?
– Leí tu nota ¡hip! que me decía. . . . ¡Cuchi-Cuchi, esta noche te quiero ‘embriagado’ !
A lo que la esposa le contesta.
– «EMBRIAGADO NO IMBÉCIL… LA NOTA DECIA ‘ENVIAGRADO’ idiota . . . . . . EN VIAGRADOOOOO !!!’