Ubicado en pleno centro de Madrid Pink SushiMan es una propuesta novedosa que ha logrado fusionar con gran creatividad el tradicional concepto de autoservicio (self-service) con una de las cocinas más demandadas en el mundo occidental en la actualidad: el sushi. Con esta propuesta, Pink Sushi logra generar un ambiente atractivo para sus comensales, brindándoles una experiencia original y divertida, y a su vez, puede prescindir del personal del salón, ya que esta tarea es realizada por la misma tecnología en que se basa la organización y la decoración del local: La cinta transportadora
En Pink Sushi una banda deslizante automática de metal recorre todo el local. Rodea una barra donde se sientan los comensales, mientras en el centro dos cocineros preparan los sushis, ensaladas y otros platos típicos de la gastronomía japonesa que ofrece el lugar para aquellos que no se animan todavía al sushi. La cinta llega hasta el final del salón, y en torno a ella se ubican las barras en las que los comensales pueden sentarse a disfrutar del servicio. Al final del local, además, hay un sector más íntimo de mesas, que también es aprovisionado por el sistema de cintas transportadoras.
Los cocineros elaboran todos los platos a la vista, y van rellenando la cinta transportadora de nuevos platos a medida que los van produciendo. Cada plato elaborado puede permanecer hasta dos horas circulando en la cinta, pasado este tiempo, el mismo de no haber sido consumido es retirado para garantizar la frescura de cada preparación. Los platos circulan en la cinta transportadora para que los comensales puedan optar por servirse cualquiera de ellos.
Fuente: Espacio Gastronómico